lunes, 12 de noviembre de 2012

De paseo por Porto


Porto está al norte de Portugal, en la costa. Algo que me gustó y que también sentí en Atenas en el 2010, es que estas ciudades de los países satélites de Europa occidental, no son tan ostentosas como las grandes capitales. Paris, Madrid, Barcelona, me parecen la ostentación pura de la civilización occidental. Todo limpio, ordenado, grandes avenidas, en fin de todo. No me imagino si eso siento en esas ciudades, que voy a sentir si un día visito una ciudad nórdica o alemana.
Porto y Atenas tienen el encanto de lo sencillo pero ordenado. La ciudad es limpia, uno se siente seguro, pero al tiempo no todo es perfecto y se ven edificios abandonados, con la fachada dejada etc. No se ve la abundancia de las otras ciudades. Pero eso me gusta, siento el ambiente como más relajado y como a algo a lo que podríamos aspirar más fácilmente en Bogotá.

Centro de Porto


Cada vez me convenzo más que nuestro principal problema es cultural. Nos falta mucha educación y no en conocimientos generales o ciencias, sino como personas. Cuando he estado en Atenas y ahora en Porto, la situación para ellos ha sido jodida, son países literalmente cagados, pero eso no es razón para que la gente esté robando a diestra y siniestra. Somos una cultura de ladrones y del más violento.
Volviendo a Porto, la ciudad como tal es pequeñita 200 y pico mil habitantes. El área metropolitana creo que llega como a los 1,8 millones. Me llamó la atención que el metro es realmente un tranvía.
Metro de Porto

Un día hicimos un tour a la zona de los viñedos un poco al norte. Probamos el vino de oporto directamente de la fábrica.  Nos toco solos con el guía-conductor, el tipo es un bacán, nos iba hablando de todo lo que había alrededor del camino y contándonos datos curiosos, eso me gusta, sentirle el gusto a la gente por lo que está haciendo. Luego nos contó que había turistas, especialmente brasileros que no le paraban bolas. Entonces me imagino que él también estaría contento con nosotros, porque le poníamos atención a todo lo que decía. La historia del tipo es tenaz, era director comercial, por la crisis la empresa donde trabajaba quebró, le dio un infarto y la mujer lo dejó. Nos decía que ahorita se está ganando la mitad de lo que ganaba hace 20 años. Tenaz!!! Pero en medio de todo, según dice, lleva una vida más tranquila.
Con Pati, visitando los viñedos

Y eso es lo que significan para mi las grandes ciudades europeas, vivir para trabajar, ostentar riquieza. No creo que valga la pena trabajar tanto para ostentar tanto. Las ciudades de los países satélites por el otro lado, las veo como la vida tranquila bien llevada. Tal vez sea una idea errada de turista, pero ambos tipos de ciudades me sirven para materializar ideas propias.

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